Las ventosas son usadas para aliviar tensión y promover el flujo regular de energía. Las ventosas colocadas en la piel crean un efecto de vacío que se consigue mediante el calor o la succión.
La técnica de ventosas es una de otras tantas dentro de la Medicina Tradicional China, un poco menos conocida que la acupuntura, pero que también proporciona una experiencia agradable y grandes efectos. Uno de los registros históricos más antiguo de esta práctica se encontraron en una guía de prescripciones para emergencias, escrita por un herbolario en el 300 d. C.
Esta técnica usa pequeñas tazas de cristal, bambú y plástico (hoy en día) como dispositivos de succión que son colocados en la piel. Una de las maneras de crear el vacío es consumiendo con fuego el oxígeno existente dentro de la ventosa. Las llamas nunca son usadas cerca de la piel ni se utilizan como parte del protocolo, sino que son un medio de crear el calor que causa la succión dentro de las ventosas. Otra forma no menos efectiva es utilizar una bomba de succión.
Una vez que la ventosa se adhiere al tejido, se puede arrastrar suavemente, moviéndola por la superficie del cuerpo. La succión hace que la piel y la capa superficial de los músculos y fascias sean ligeramente atraídas al interior del recipiente, consiguiendo un efecto de masaje. Para la mayoría de los clientes, la sensación y los resultados son particularmente relajantes.
En otro método de aplicación, las ventosas se dejan inmóviles durante aproximadamente diez minutos mientras el cliente reposa en posición relajada. El efecto conseguido en este caso es similar a la acupresión, una técnica de masaje de la Medicina Tradicional China que, valga la redundancia, se aplica ejerciendo presión manual en los puntos de la acupuntura así como a las partes dolorosas del cuerpo, y es conocida por proporcionar el alivio a través de esta presión.
Normalmente, la técnica de ventosas se combina con la acupuntura en una misma sesión pero también puede ser usada sola. La succión y la presión negativa proporcionadas por las ventosas relajan y crean un estado de bienestar. Es ampliamente usada también para ayudar a aliviar molestias y hasta piel de naranja. Para ello, primero se aplica un aceite sobre la piel y luego se deslizan las ventosas en direcciones específicas sobre el área afectada, consiguiendo un efecto de drenaje.
Al igual que la acupuntura, las ventosas se aplican principalmente sobre los meridianos. Usando los acupuntos de los meridianos, potenciamos el efecto de las ventosas ayudando a reencaminar y reorganizar el flujo de Qi. Actuando sobre estos canales, conseguimos “abrirlos”, haciendo que la energía fluya libremente hacia todas las partes del cuerpo.